La fuerza del Atlántico, el sabor de lo auténtico y el trabajo de lo autóctono, con esos tres ingredientes básicos los vinos de la Denominación de Origen Rías Baixas se han convertido en referencia y no dejan de batir récords y poner a la comarca gallega en el punto de mira de todo el mundo. En los 34 años de vida que tiene, la familia nacida en el suroeste gallego ha ido creciendo hasta llegar a las 175 bodegas, 4.187 hectáreas y más de cinco mil viticultores, todos unidos para conseguir el excelente vino que ha sumado 100 millones de brindis y 37 millones de botellas vendidas en el último año.
Oro líquido
Este oro líquido proviene de las cinco subzonas que conforman la Denominación de Origen: Val do Salnés, Condado do Tea, O Rosal, Soutomaior y Ribeira do Ulla. La diversidad de las uvas autóctonas (hay 13 permitidas además de la Albariño) que se cultivan, los matices que aporta cada una de estas cinco subzonas que la componen, la infinita variedad de coupages que ofrece y su versatilidad, son el secreto bajo el que se amparan las hasta 1.500 marcas de vino que engloba.
Con esta carta de presentación es normal que atesore más de 100 galardones en solo un año. Nacional e internacionalmente, los Rías Baixas han arrasado, convirtiéndose en los protagonistas mundiales de los Decanter World Wine Awards, el Concours Mondial de Bruselas y los Premios Baco.
Perfecto maridaje
Rompiendo las barreras clásicas del maridaje, el concepto que propone D.O. Rías Baixas bebe de su propia realidad, por ello sirve de acompañamiento perfecto al marisco gallego, pero también al sushi, a las notas picantes de la gastronomía mexicana y hasta al cordero asado en Castilla. Razón por la que son vinos que han ganado presencia en España, pero también triunfan desde hace décadas más allá de nuestras fronteras.
De hecho, de los casi 37 millones de botellas vendidas, más de 12 millones corresponden a ventas internacionales a más de 70 países alrededor del globo. Millones y millones de litros que han viajado de Galicia al extranjero equivalentes a más de 50 millones de euros de facturación. Datos simplemente abrumadores que confirman la conquista de Europa, Asia, Estados Unidos y también el Caribe. Territorios que se rinden ante la esencia atlántica de estos vinos. Autenticidad, una materia prima de primera y el trabajo bien hecho, así es el vino D.O. Rías Baixas que triunfa en el mundo.
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