En la Denominación de Origen Rías Baixas cada mes de septiembre entramos en pleno período de vendimia, un momento clave en el ciclo vegetativo de la vid, en el que los frutos maduran y se recogen. Pero en la actividad de nuestros viticultores, que se afanan en recolectar la cosecha, y para nuestras bodegas, que inician la elaboración de los vinos de la próxima añada, en este caso, la de 2021.
La vendimia es un momento único en las zonas vitivinícolas como las Rías Baixas que se convierte en una fiesta de inicio de la temporada. Pero en cada lugar existen peculiaridades únicas que definen la forma de trabajar y de vendimiar, y la DO Rías Baixas tiene las suyas. Para ser un auténtico #wineloverRíasBaixas y entender lo que leas a partir de ahora sobre la vendimia 2021 en las Rías Baixas hemos preparado un diccionario con los términos clave sobre la vendimia.
En la DO Rías Baixas existen unas 22.500 parcelas de viñedo que suman una superficie de algo más de 4.000 hectáreas de terreno. Estas cifras dan una pista del minifundismo que caracteriza la viticultura en la DO Rías Baixas y determinan cómo se aborda la vendimia. Ya te contamos en nuestro post sobre la vendimia cómo se preparan las parcelas para este momento clave.
La parra o el emparrado es la forma de conducción de la vid más característica y tradicional de la DO Rías Baixas. Los característicos pilares de granito (o de hormigón) de entre 1 y 2 metros de altura unidos entre sí por líneas alambre son la estructura sobre la vid crece y trepa. Al ser un sistema vertical, aprovecha al máximo las horas de insolación, aleja la planta del suelo, evitando la proliferación de enfermedades de la vid, y permite que los racimos pendan bajo la parra y crezcan ventilados.
La espaldera es una forma de conducción menos frecuente en la DO Rías Baixas, pero que ha ganado peso en los últimos años. Toma su nombre del sistema de soporte de la vid, que se estructura en calles con una línea de postes unidos por tubos o alambre a lo largo de los que se plantan las cepas separadas por entre 5 y 10 metros. Los defensores de las espalderas destacan entre sus ventajas la mayor aireación y exposición al sol (siempre que estén bien orientadas) y una mayor facilidad para el cuidado de la vid.
En la certificación de la DO Rías Baixas sólo está permitida la vendimia manual. Y esto tiene mucho que ver con la viticultura tradicional y la implantación del emparrado, que imposibilita que la poda o la vendimia se mecanicen. Esto hace que la vendimia de las Rías Baixas exija más personal que en zonas donde abunda el emparrado.
El aforo de uva o de cosecha es una estimación de producción de uva que va a ser vendimiada en cada campaña.
La vendimia en la DO Rías Baixas no tiene, como en el resto de las zonas vitivinícolas, una fecha fija. El proceso de maduración de la uva determina el inicio de la cosecha, pero también influye el clima, ya que la vendimia debe hacerse con tiempo seco. La diversidad de nuestra DO, con una distribución tan amplia de parcelas en cinco subzonas diferentes, con ligeras diferencias climáticas, de altitud, exposición al sol, proximidad al mar, etc. y la propia naturaleza de la vid hace que el proceso de maduración sea heterogéneo.
Debido a esto, la vendimia en la DO Rías Baixas suele arrancar antes en las subzonas de O Rosal y Condado do Tea que en O Salnés, Soutomaior o Ribeira do Ulla. Influyen en esto además las distintas elaboraciones. Por ejemplo, la uva que antes se recoge es la que se utiliza para el vino base en la elaboración de Espumosos Rías Baixas.
A todos los implicados en el mundo del vino nos gusta decir que la vendimia es nuestra fiesta, pero más allá de las uvas, los auténticos protagonistas de la fiesta son los viticultores, quienes plantan las vides, las cuidan durante todo el año, las fertilizan, las protegen del clima y las plagas y las podan para lograr la mejor cosecha. Así que si es buena, el mérito es principalmente suyo.
Los vendimiadores son las personas que, por lo general, se contratan de forma temporal, para recoger las uvas en cada parcela de la DO Rías Baixas, seleccionando los mejores racimos. Su trabajo es duro e intenso pero breve en el tiempo, de unas 2 semanas al año. Sin embargo, sin ellos, es imposible cumplir la ecuación de recoger la uva en el punto exacto de maduración necesaria y que llegue en perfectas condiciones a la bodega para ser vinificada.
Los técnicos de viñedo son profesionales habitualmente asociados a una empresa viticultora y se encargan de realizar cuidados en la vid durante todo el año. En la vendimia coordinan el trabajo de los vendimiadores y supervisan que los trabajos no produzcan daños en la vid.
Los técnicos de bodega son las personas encargadas de recibir las uvas recién vendimiadas en la bodega e iniciar su manipulación con el despalillado (la separación de los frutos de la parte leñosa del racimo), maceración en frío, estrujado y un largo etcétera de procesos que te contamos en nuestro post sobre la elaboración de los vinos Rías Baixas.
Los veedores son los profesionales que cada año contrata el Consejo Regulador de la DO Rías Baixas para verificar que bodegas y viticultores siguen los procesos establecidos en el pliego de condiciones de la DO Rías Baixas y su reglamento. Los veedores llevan distintivos que los identifican; realizan auditorías en las bodegas para comprobar el cumplimiento de los requisitos exigidos en el pliego y en las normas de vendimia, pero siempre supervisados por el Órgano de Control del CRDO.
El enólogo de la bodega es a menudo el responsable de decidir el día en que empezará la vendimia en los viñedos de los que se abastece para elaborar sus vinos. En las semanas previas a la vendimia, realiza numerosos análisis de la fruta en cada parcela y participa en la zonificación de terrenos para decidir el orden en el que se realizará la cosecha. Como responsable de la elaboración de los vinos, lleva un control exhaustivo de la materia prima antes, durante y después de la vendimia.
Está formado por el secretario y el presidente del Consejo Regulador de la DO Rías Baixas, y actúa como salvaguarda del Comité Técnico, es decir, verifican que su trabajo está realizado correctamente.
Como ves, la vendimia es un trabajo complejo y variable en el que confluyen todos los intereses y profesionales ligados al mundo del vino. Pero dentro de nuestra diversidad, existen viñedos y bodegas grandes y pequeños, en los que muchas de las tareas profesionales que hemos definido son asumidas por más o menos personas. Y todos elaboran vinos de la extraordinaria calidad que caracteriza a la DO Rías Baixas. ¡Brindamos por ellos y por una buena vendimia!