El maridaje es un concepto muy habitual en el mundo del vino, como en general de las bebidas alcohólicas, los quesos y la gastronomía. Una persona puede disfrutar de una comida o un alimento con un vino u otra bebida o puede vivir una experiencia gastronómica diferencial en la que el vino, en nuestro caso, y la comida sirvan para realzarse mutuamente y brindar al paladar sensaciones únicas que por separado no se producen. Aquí es cuando una comida o aperitivo pasan a convertirse en un maridaje.
Es cierto que en el mundo winelover nos gustan las experiencias de altura, y en la D.O. Rías Baixas nos encanta mostrar maridajes a la altura de la altísima calidad de nuestros vinos, pero lo cierto es que un maridaje puede ser desde una propuesta sencilla de tapas o picoteos en casa o en la barra de un bar hasta una comida o cena de varios platos y postre. Y la buena noticia es que muchos de ellos combinan a la perfección con vinos D.O. Rías Baixas.
Es probable que en alguna ocasión te haya surgido la duda de qué vino elegir para una comida o cena, sobre todo si vas a servir platos diferentes y tienes dudas de si un único vino encaja con todos ellos. Acertar no es tan difícil como parece; solo es necesario conocer algunos detalles que te contamos a continuación. Y probar, no te olvides de probar y desafiar las normas, porque las experiencias sensoriales son muy personales y lo más importante es que disfrutes del vino que a ti más te guste con el maridaje que más te seduzca.
Armonizar es sinónimo de maridar y lo es por algo. A la hora de combinar un vino con un plato o alimento, lo más importante es que exista cierto equilibrio en intensidades y sabores. De aquí viene la norma, hoy superada, del blanco para los pescados y el tinto, para las carnes. Es una simplificación de lo que comentábamos al principio: maridar significa que vino y comida se aporten nuevos sabores y matices, sin que uno enmascare a otro. Si degustas un plato de sabor muy contundente con un vino ligero, éste perderá su gracia y si unes un vino muy potente con un plato de sabor suave y delicado, éste quedará completamente opacado. Por poner solo un ejemplo, un Rías Baixas Albariño combinará mejor con un risotto de setas que con chorizo.
Los sabores y sensaciones táctiles en la boca son importantes a la hora de maridar un vino. Por ejemplo, la acidez de un vino, una de las grandes cualidades de nuestros Rías Baixas Albariños, ayuda a compensar características de los platos, como la grasa y la dulzura. La astringencia o la presencia de taninos en los vinos también puede modularse con una preparación alta en proteínas y por eso se recomienda este tipo de vinos para carnes rojas.
Si te gustan los vinos con acidez marcada, intenta no maridarlos con platos más ácidos, dado que les restará personalidad. A la vez, si vas a maridar un vino dulce con un plato dulce, intenta que sea tanto o más dulce que el plato o postre. En caso contrario, el vino perderá sus sabores a fruta y puede resultar hasta amargo.
Con todo lo dicho hasta ahora parece que solo pueden armonizarse vinos y comidas de perfiles similares, pero nada más lejos de la realidad. Existen diversos tipos de maridajes que puedes realizar:
Nuestros vinos son ligeros, frescos, delicados, con una acidez bien integrada y por ello son mucho más versátiles en cuestión de maridajes que muchos vinos tintos y la mayoría de los blancos.
Por eso, como decíamos antes combinan muy bien con gastronomías de todas las latitudes, como la cocina gallega y española, la mexicana, la japonesa, la taiwanesa, la italiana y un larguísimo etcétera. Es por ello y por la gran calidad de nuestros vinos que triunfamos en el mercado internacional con nuestros Blancos como Ningunos, tanto que más del 30% de los vinos D.O. Rías Baixas que producen nuestras bodegas se consumen en el extranjero.
A esta versatilidad de nuestro vino más popular se une la enorme variabilidad de elaboraciones que realizan nuestras bodegas. Además de vinos monovarietales Rías Baixas Albariño jóvenes, con crianza sobre lías en depósito de acero inoxidable, en barrica, fudre o en depósitos de granito u hormigón, Albariños Rías Baixas de guarda, puedes encontrarte plurivarietales que combinan Albariño, con otras uvas autóctonas como el Rías Baixas Rosal o de Albariño, Rías Baixas Condado do Tea, Rías Baixas Val do Salnés o Rías Baixas Ribeira do Ulla, y también Rías Baixas espumosos y Rías Baixas Tintos. Un abanico enorme que puedes combinar casi con cualquier comida. ¿Quieres algún ejemplo?
Los aperitivos a base de canapés, embutidos Ibéricos, encurtidos o empanadas maridan espectacularmente con un Rías Baixas Espumoso fresco, de burbuja fina y textura cremosa. Un vino de una calidad sublime que también sería nuestra gran elección, junto con nuestro omnipotente Rías Baixas Albariño, en caso de que busques un solo vino para acompañar toda la comida.
Los entrantes a base de pescados y mariscos, masas hojaldradas, preparaciones picantes o especiadas casan perfectamente con un Rías Baixas Albariño y si quieres sublimar el sabor a mar, prueba con alguno fermentado o con crianza en granito.
Los platos de pescado y marisco, arroces caldosos de sabor a mar o paellas, las preparaciones picantes, saladas, grasas, las aves al horno y las salsas elaboradas a base de nata o mantequilla y las ensaladas maridan muy bien con un Rías Baixas Albariño.
Las parrilladas de verduras, los risottos, los pescados de río como la lamprea o el salmón, los platos de pasta, especialmente los horneados, las tartas saladas de verduras, las setas o los platos con bechamel combinan a la perfección con Rías Baixas Rosal y Rías Baixas Condado.
Los ahumados, pescados y carnes a la parrilla, guisos de carnes blancas, los platos elaborados con frutos secos y quesos semicurados solos o en salsas son ideales los Rías Baixas Barrica.
Los platos con carnes rojas o contundentes y grasas como un cocido gallego, un lacón con grelos o un cordero ganan con Rías Baixas Tintos, vinos ligeros y con acidez que ayudan a limpiar la boca, pero a la vez tienen presencia de frutas rojas que tan bien casan con las carnes.
Si estás ante una tarta con masas de hojaldre, pruébalo con un Rías Baixas Espumoso, pero si tiene chocolate, atrévete con uno de nuestros tintos y cuéntanos la experiencia. 😉