Volver

20 de agosto

25 años de historia para la cata-concurso Rías Baixas Albariño

De 54 marcas de Rías Baixas solo tres fueron las elegidas por los 23 catadores que participaron en el 25 aniversario de cata-concurso Rías Baixas Albariño. Y es que unas Bodas de Plata no se celebran todos los días, así que los profesionales del panel de cata interno del Consejo Regulador y del externo se pusieron las pilas para elegir a los mejores Rías Baixas Albariño de 2012, coincidiendo con el 25 aniversario de la constitución del Consejo y de la Cata Concurso Rías Baixas Albariño. El reto era importante!! Y esto fue lo que decidieron: la medalla de oro recayó en la marca Esencia Diviña, de Adegas Gran Vinum; la medalla de plata en el Rías Baixas Albariño de Valtea, de Bodegas Vilarvín y; la medalla de bronce en Paco y Lola, de Cooperativa Vitivinícola Arousana.  Este es el criterio del jurado experto, pero hay una amplia gama de Rías Baixas Albariño que merece la pena ser probada, además de los premiados. Algunos seguro que te sorprenderán.

Siguiendo con este 25 aniversario de la Cata-Concurso Rías Baixas Albariño. Ya los catadores explicaban que la llamada Cata Prima, a la que acudieron 54 vinos de Rías Baixas, sirvió para hacer la selección de vinos que pasaron a la Cata Derradeira, que se celebró al día siguiente. Unas veces es más difícil que otras, pero estos expertos catadores ya tienen entrenados sus ojos, sus narices y sus papilas gustativas para elegir cuáles deben ser los mejores Rías Baixas del año. No es fácil ser juez y, como en toda competición, puede parecer subjetivo pero las elecciones, aunque difíciles, están basadas en criterios profesionales. Para poder saber qué pensaban durante la 25 edición de la Cata Rías Baixas Albariño, celebrada en el Parador de Cambados el pasado 3 y 4 de agosto, hablamos con algunos de estos profesionales a la salida de la cata-concurso e, incluso, en los descansos.

Cristina Alcalá, de Mi Vino/Vinum, que no es la primera vez que participa en esta cata concurso nos contó que: “la 2012 es una añada aceptable en calidad, pero quizá algo irregular. En general encontró los vinos mejor en boca que en nariz”. Ana María Rodríguez, del departamento de vinos del ICEX y catadora oficial en el concurso de Bruselas, que participaba por primera vez en ella, comentó que “cuando catas vinos monovarietales esperas que sea todo igual, pero lo cierto es que en este caso con los Rías Baixas Albariño  no fue así”. Mar Romero, colaboradora en la revista Capital y en Gestiona Radio, que acudía por segunda vez coincidió con otros catadores en que “los vinos de Rías Baixas de esta añada quizá sean cortos en nariz, pero hay algunos que en boca sobresalen”. Santiago Jordi Martín, presidente de la Federación Española de Asociaciones de Enólogos, que visitaba por primera vez la Fiesta del Albariño resaltaba que “los vinos que más me gustaron fueron los que crianzas sobre lías, porque son más complejos y tienen mejor boca”, también coincidió con otros compañeros de cata en que “las narices son algo cortas”. Para Pepe Barrena, periodista, crítico gastronómico y premio nacional de gastronomía, cree que “los vinos eran un poco uniformes, no muy complejos”. Finalmente, Juan Barbacil, colaborador de Heraldo de Aragón, COPE Radio y RNE, describió los vinos de la 25 edición de la cata-concurso Rías Baixas como “correctos, aunque en nariz algo cortos”. También estuvieron presentes en este panel catadores internos del Consejo Regulador  y, en los externos, desplazados para la ocasión, también acudieron Cristino Álvarez, Julián Palacios, ingeniero agrónomo y catador que trabaja en protocolos de clasificación de calidad en viñedos; Jesús Flores, de Aula del Vino; y Tyales Veiga, sumiller de AGASU y bicampeón gallego de sumilleres, entre otros.