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06 de julio

Bodegas Valdamor, de la leyenda a los Albariños Rías Baixas de la máxima calidad

Con cerca de tres décadas de existencia, esta bodega ha buscado en sus monovarietales de Rías Baixas el reflejo del terruño

“Unos vinos únicos y muy personales, que son el vivo reflejo de los terruños”. Así definen desde Bodegas Valdamor sus Albariño Rías Baixas. Esta bodega familiar, localizada en la subzona de Val do Salnés de la Denominación de Origen Rías Baixas, cuenta con casi tres décadas de historia en las que se fueron adaptando a los nuevos tiempos, pero sin renunciar a una viticultura respetuosa con el medio natural y con las joyas que sus cepas centenarias les proporcionan: las uvas de la variedad albariño. Su vinculación con el terroir se puede ver en el propio nombre de la bodega. Este deriva de la adaptación de la zona en la que se encuentra, conocido por los lugareños como Valle del Amor. Dicha definición viene de una antigua leyenda gallega sobre dos jóvenes de familias enfrentadas que plantaron una cepa de vino. La planta iba creciendo a medida que aumentaba su amor para dar finalmente “un fruto tan dorado y sabroso como ningún otro conocido”, indican desde esta bodega. El proyecto de Bodegas Valdamor surgió en 1990 a través de una sociedad presidida por Manuel Domínguez Limeres, cuyos padres eran productores y cosecheros de vino. La filosofía, desde sus comienzos, siempre ha sido clara: “Elaborar vino de calidad basándose en la uva albariño de la subzona de Val do Salnés”, concretan.

Esta forma de trabajar les ha permitido, en sus palabras, “ser un referente a la hora de dar a conocer los Albariños Rías Baixas”. Durante estas casi tres décadas también tuvieron que adaptarse a las nuevas exigencias y avances del mercado. Por ello, se llevaron a cabo obras “de ampliación y, sobre todo, de mejora de las instalaciones y maquinaria, para dotar a la bodega de la tecnología”, explican. Gracias a ello, pueden “aprovechar al máximo las cualidades del hollejo de la uva, para aportar toda la riqueza del mosto yema y prensa”. A estas dotaciones cabe añadir la adquisición de “barricas de roble Nevers francés para la maceración de los vinos de barrica”.

Una tecnología que conjuga perfectamente con la tradición, reflejada en “el estrujado de prensa neumática sin reventar la pepita de la uva para que no lleve sabores ajenos al mosto”. Además, se desarrolla una mimada vinificación “para conseguir la pureza y excelencia de las cepas centenarias de la variedad albariño”. Esto da como resultado “un vino claro, transparente verdoso lleno de aromas limpios y afrutados” que ya han conseguido varios reconocimientos tanto a nivel nacional como internacional. No en vano, sus Albariños Rías Baixas están presentes en países como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Irlanda o Puerto Rico. Entre sus productos destacan el monovarietal Valdamor, su buque insignia, además del Valdamor Barrica –envejecido en barrica de roble francés entre 6 y 9 meses- y Namorío. A mayores, también elaboran Aguardiente de Orujo de Galicia, Licor de Hierbas de Galicia y Licor Café de Galicia, además de otro tipo de destilados.

 

Enoturismo y Club del Vino

Siempre muy vinculados a la sociedad, Bodegas Valdamor está integrado dentro de la Ruta do Viño Rías Baixas como reflejo de su clara apuesta por el enoturismo. Consideran que “se potencia el atractivo turístico y el potencial vinícola de la zona, para que, a través de las visitas guiadas a la bodega, de modo que el visitante pueda conocer y trasladar a sus amistades la riqueza de la zona y de los vinos”. En general, “el público que nos visita siempre se lleva a su lugar de origen una experiencia única que compartir, aparte de engrandecer sus conocimientos sobre el mundo del vino”, aseguran. A mayores, y con el fin de mantener esa relación cercana con sus clientes, Bodegas Valdamor cuenta con su propio Club del Vino. Se trata de un lugar de encuentros para los amantes de la enología y que ofrece numerosas ventajas a sus asociados. Este club “está en continuo crecimiento y, a través del mismo, la bodega asesora y responde a todas aquellas dudas que puedan tener sobre todo lo relacionado con el vino. De esta forma, buscamos unos clientes mucho más conocedores de este enriquecedor mundo y con amplios conocimientos sobre él”, concluyen desde Bodegas Valdamor.